Cómo acelerar su red inalámbrica con estos 5 consejos

Cuando se piensa en una red doméstica, lo primero que viene a la mente es probablemente un montón de cables y cajas. Pero, en realidad, no hay nada especialmente complicado. Lo único que necesitas es un buen router Wi-Fi doméstico y un poco de paciencia. Lo único que tienes que hacer es configurar la conexión inalámbrica entre el router y tus dispositivos. Si tienes un smartphone o una tableta Android, puedes incluso utilizar la aplicación Wifi de Google para crear una red Wi-Fi segura desde cualquier parte del mundo. Aquí algunos consejos para acelerar la velocidad WiFi.

Establecer una conexión segura

Una de las cosas más importantes que puedes hacer para asegurarte de que tu red permanece segura es utilizar un protocolo de encriptación. Los protocolos de encriptación WiFi son diferentes tipos de encriptación que codifican los datos antes de ser enviados por el aire. Esto significa que sólo las personas en las que confías pueden conectarse a tu red Wi-Fi, y sólo cuando están conectadas exactamente a la misma red que tú. Para que el proceso de encriptación funcione, todos los dispositivos que forman parte de la red deben estar en la misma página. Si no tienes una contraseña para tu red, alguien podría conectarse fácilmente a tu red Wi-Fi doméstica sin problemas. Pero, esto probablemente les llevaría a ver todos los datos que se envían y reciben en toda la casa. Esto podría conducir al robo de identidad, a pérdidas financieras y a la exposición a infecciones dañinas. Por lo tanto, para mantener la seguridad de su red, debe asegurarse de que todos los miembros de la red tengan una contraseña.

Configurar una red de invitados

Las redes de invitados son una forma estupenda de incluir a tus familiares y amigos en la red para que puedan acceder a Internet y a tus datos sin problemas. Para configurar una red de invitados, tendrás que asegurarte de que las propiedades en las que se aloja la red son las mismas que utilizan los miembros de tu grupo. Puedes elegir una red pública a la que pueda acceder cualquier persona de la casa, o puedes utilizar una red privada que sólo tú conozcas. En primer lugar, asegúrate de que todos los miembros de la red están de acuerdo haciendo que todos firmen un acuerdo de red para invitados. Puedes ponerte en contacto con tus amigos y familiares para asegurarte de que están de acuerdo contigo. Una vez que todos estén de acuerdo, es hora de poner en marcha la red de invitados. Necesitarás un punto de acceso (el dispositivo que realiza la conexión a Internet) y un dispositivo que actúe como servidor. En este ejemplo, utilizaremos un dispositivo Android. A continuación, crea un perfil distinto para cada invitado de la red. Esto te ayudará a controlar quién está conectado a la red y quién no. Los invitados pueden acceder a Internet a través de tu servidor simplemente conectando su dispositivo a la red. Incluso puedes crear una página especial en tu servidor a la que sólo puedan conectarse los invitados. Esto te ayudará a mantenerte organizado y a evitar que los miembros de la red invitados accedan a tus datos cuando no deberían estar en tu red.

Utiliza una conexión rápida por cable

Las compañías de cable están a punto de recibir una importante demanda por lo que probablemente sea la política de servicio al cliente más ridícula del mundo. Pero, por el amor de todo lo bueno y puro, no cometas este error. Cuando firmes un contrato que diga que obtendrás un determinado número de Mbps de tu proveedor de Internet, asegúrate de que realmente lo estás obteniendo. Porque, si no es así, su experiencia será probablemente mucho menos fiable y menos consistente de lo que esperaba. Las compañías de cable han avanzado mucho en la última década para que sus servicios sean más fiables y constantes. Pero aún hay margen de mejora. No es ningún secreto que la Internet de alta velocidad se ha convertido en un lujo cada vez mayor. Y, aunque muchos pueden optar por renunciar a la oportunidad de experimentar una Internet más rápida en favor de servicios más estables y fiables, esta decisión probablemente perjudicará más que ayudará a su organización a largo plazo. Así que, para salvar su alma, invierta en un cable de alta velocidad que le proporcione la velocidad real que acordó. Y, por el amor de Dios, mételo en tu casa. Puedes agradecérmelo después.

No utilices la misma contraseña para todo

Esto es bastante obvio. Si utilizas la misma contraseña para todas tus cuentas, alguien podría acceder a todas ellas. Esto podría dar lugar a que se cargue dos veces en tu tarjeta de crédito, se vacíe tu cuenta bancaria y se piratee tu correo electrónico. Pero hay resultados aún peores. Si alguien consigue acceder a su red informática, podría encontrar fácilmente su nombre de usuario y contraseña y utilizarlos para acceder a otras cuentas en el mismo ordenador. Esto podría resultar en el robo de su identidad, o incluso en la piratería de su cuenta de correo electrónico. Así que, para mantener la seguridad de tus redes, asegúrate de que utilizas contraseñas únicas en cada cuenta. Y, por el amor de Dios, no la pongas en tu agenda.

Apaga los dispositivos que no estén en uso

Probablemente ya te habrás dado cuenta de que la raíz de la mayoría de los problemas de la red está en una mala conexión. Esto se debe a que los dispositivos que componen una red Wi-Fi doméstica suelen ser bastante móviles. Y, como la mayoría de nosotros está descubriendo ahora, las conexiones de datos móviles no están a la altura de la robustez de una red Wi-Fi doméstica. Así que, para evitar que tu red se vea sobrecargada, lo mejor es apagar los dispositivos que no se estén utilizando. Puedes conseguirlo yendo a la configuración de red de cada dispositivo que esté en tu red y desmarcando la casilla «Usar este dispositivo para la conexión a Internet». También puedes utilizar la aplicación Google Wifi para gestionar tu red desde cualquier parte del mundo.

Conclusión

Tener una red inalámbrica doméstica fuerte es beneficioso por muchas razones diferentes, pero sobre todo proporciona comodidad para sus dispositivos. No hay nada como poder conectarse a una conexión a Internet doméstica fiable desde cualquier lugar de tu casa. Y, gracias a la tecnología actual, puede hacerlo desde casi cualquier lugar del mundo. Lo único que necesitas es tener una conexión a Internet y un router doméstico. A partir de ahí, sólo hay que seguir unos sencillos pasos para poner en marcha la red Wi-Fi de tu casa.

Author: comunicados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *